El articulo que os traigo hoy se trata de como un indigente pasa un día cualquiera desde que se levanta sobre las seis dela mañana recoge sus cuatro pertenecías que apenas cogen en su destartalado carrito del supermercado se asea un poco y empieza su devenir por las calles de la ciudad para ganarse la vida pidiendo en alguna esquina, en la puerta de algún supermercado o en alguna puerta de alguna iglesia. la jornada laboral de un indigente ( si es que se puede llamar así) comienza generalmente sobre las nueve de la mañana si el indigente pone su oficina ( que es como los indigentes llaman al sitio en donde generalmente piden) empieza sobre las nueve de la mañana ya que es cuando suelen abrir estos establecimientos y viene durando hasta las dos o las tres de la tarde, con un poco de suerte y si el indigente ya es conocido por el barrido habrá podido sacar algo mas de diez o quince euros ademas de los alimentos que los clientes del supermercado y siendo ya conocido por estos le regalan cada día para que pueda subsistir.
Si el indigente por el contrario tiene establecida su oficina en la puerta de alguna iglesia o parroquia su jornada laboral comenzara sobre las ocho de la mañana que es cuando generalmente comienza el horario de las misas dura hasta la una y media de la tarde que es cuando finaliza la ultima misa de la mañana.
También como en el caso de los supermercados los indigentes que se ponen ya llevan años poniéndose en el mismo sitio por lo cual ya son muy conocidos por el barrio, y tienen sus clientes habituales que todos los días les dan alguna moneda.
Cuando termina el horario de misas los indigentes suelen acudir algún comedor social que este cerca de la iglesia en donde comerán el el menú que hayan preparo ese día y que suele estar compuesto de un primer y un segundo plato y una pieza de fruta, también se les suministra algún bocadillo y una pieza de fruta para por la noche.
Los indigentes para poder ducharse y asearse tiene a su disposición duchas publicas en donde por 40 céntimos de euro pueden ducharse durante quince minutos, al entrar en ellas se les da champú, una toalla y en el caso de los hombres maquinillas de afeitar y espuma de afeitar para tal efecto.
Los indigentes también disponen de roperos para que puedan ir a por ropa limpia, los horarios y días para recoger dicha ropa varían ya que son varios los roperos que hay dispersos por todo Madrid.
Después de esto los indigentes vuelven o a las puertas de la iglesia en donde han pasado la mañana o a los de los supermercados y suele estar allí hasta el horario de cierre de los mismos,
Después se dirigen con sus escas pertenencias a los sitios donde suelen pernoctar, durante el trayecto hasta los lugares en donde pernoctan irán recogiendo cartones para prepararse la cama en donde dormirán esa noche hasta la mañana siguiente, en la que volverán a iniciar su rutina diaria.
BUBÚ
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